Artículo de la revista Cuerpo y Mente - El bienestar en tus manos

(Aunque este artículo concierne las manos, es totalmente válido para la reflexología de los pies.)

El bienestar 
en tus manos

Las manos, al igual que los pies, mantienen un vínculo energético con el resto de órganos y sistemas del cuerpo. El masaje reflexológico permite tanto relajarse como aliviar dolencias muy comunes.

La reflexología es una técnica manual que se aplica mediante presiones en diferentes zonas corporales a fin de mejorar el estado de salud. Cada una de esas zonas (el pie, la oreja, las manos...) es tratada con un método muy específico que llega a adquirir una identidad propia.
La reflexología es una de las terapias conocidas como blandas, llamadas así porque no resultan agresivas para el organismo. Sin embargo, como el cuerpo no tiene que contrarrestarla acción de agentes tóxicos, la reacción curativa puede ser muy rápida (...).


UN ORIGEN ORIENTAL
El masaje reflexológico de las manos se inspira en terapias orientales como la digitopuntura china y el masaje shiatsu japonés. Estas disciplinas buscan armonizar y equilibrar el cuerpo mediante la liberación de los bloqueos energéticos. Se considera que estos bloqueos, tanto si son por saturación como por deficiencia energética, pueden ser el origen de cualquier proceso de desequilibrio del cuerpo físico, y por tanto generadores de enfermedad.

El masaje reflexológico de las manos y la reflexología podal comparten los mismos principios. Ambas técnicas consideran la enfermedad como un proceso sintomático y estudian la posible relación de órganos, glándulas y vísceras que mantienen una desarmonía funcional. Esta se expresa de modo muy concreto a través de los diferentes reflejos localizados en las distintas zonas reflejas. (...)


CONEXIÓN CON EL ORGANISMO
(...) El masaje reflexológico es capaz de activar el enorme potencial de energía que cada ser humano posee en su estructura biológica. Esta energía es la que cabe movilizar para mantener la salud y la que permite hacer frente  a la agresividad y a los constantes cambios del medio en el que vivimos. Gracias a ella también podemos desarrollar los aspectos positivos de nuestra personalidad.

Tanto en las manos como en los pies existen puntos que mantienen una conexión refleja con los distintos órganos, vísceras y estructuras del cuerpo humano, así como con los sistemas en los que se integran. (...) Como en la reflexología podal, este masaje es un excelente aliado si se está siguiendo un tratamiento médico, puesto que desbloquea los canales por donde circula la energía.
Otras técnicas menos conocidas son la reflexología facial (cara), la somática (cuerpo), la raquial (columna vertebral), la auricular (oreja), la lingual (lengua) y la endonasal (mucosa interna nariz). Todas ellas pueden beneficiar nuestro equilibrio integral : físico, psíquico y sensorial.

REFLEJOS CURATIVOS
Frente a una acción se genera una reacción. Podemos decir, pues, que le masaje reflexológico en las manos recurre al sistema nervioso neurovegetativo, a través de los dermatomas cutáneos distribuidos por todo el organismo. Estos permiten generar un estímulo provocando un estímulo involuntario, siendo estos reflejos los que desencadenan una serie de reacciones que permitirán mejorar el funcionamiento del organismo.

La técnica puede ser de gran ayuda en casos como: migraña, dolor de cabeza, acné, dolor tensional, accemas, insomnio, ansiedad, acidez de estómago, digestiones lentas, estreñimiento, dolor menstrual y otras molestias habituales en la sociedad en que vivimos.

Una ventaja de este tipo de masaje es que puede realizarse en cualquier circunstancia, tanto en uno mismo como  en otra persona, ya que no presenta contraindico y puede aplicarse a cualquier edad. Únicamente se desaconseja si las manos si las manos presenten heridas o algún tipo de infección.

INTERCAMBIO DE ENERGÍAS
Este masaje se debe realizar siendo consciente de que se produce un importante intercambio energético entre quién lo da y y quién lo recibe, por lo que se aconseja efectuarlo de forma tranquila y realizando respiraciones profundas.

Si durante el tratamiento se notan las manos tensas o cansadas, es aconsejable realizar suaves sacudidas de las manos a fin de movilizar la energía acumulada. Al finalizar, el masajista debe lavarse las manos con agua corriente y fría para reactivar el flujo sanguíneo y liberar la tensión. (...)

LAS ZONAS DE MALESTAR
En las zonas sobre las que hayamos notado alguna molestia hay que incidir específicamente hasta conseguir que el malestar desaparezca. Como solo suelen dedicarse unos unos quince minutos a cada mano, podemos volver a masajear esas zonas sensibles en la siguiente sesión.
Muchas personas en algún momento de su vida han oído decir que a través de las manos se pueden predecir el presente y el futuro.

                                                                                          JOAQUÍN MUÑOZ (Reflexólogo)
                                                                                                 Revista Cuerpo y mente



Entradas populares